"La idea nació en la primavera de 2020 cuando adopté a Racùn, un adorable gatito somalí.

Este último tenía entonces pequeños problemas de salud que me llevaron a consultar a un veterinario. Sin embargo, dado que la clínica está a 20 minutos a pie de mi casa, no quería llevar a mi gato con el brazo extendido en una jaula de transporte.

Además, quería una mochila útil que pudiera usar personalmente cuando no llevara a Racùn.

Tras darme cuenta de que no existía un medio de transporte de doble uso, decidí crear una mochila de diseño, funcional y cómoda para gatos y humanos. "

Nina , fundadora de Cat-Trotter